Proyectando una Visión
La Tradición de la Diosa en Iberia tiene sus raíces en la Tradición de la Diosa en Avalon, la cual es nuestro punto de partida y fuente de inspiración. Cuando visitas el Templo de la Diosa en Glastonbury, sientes cómo sus energías te abrazan y te envuelven, invitándote a descubrir cada detalle de un espacio sagrado dedicado a Nolava, the Lady of Avalon, la Diosa de esa tierra. Acomodarte en uno de sus rincones y dejarte llevar por los aromas que flotan en el ambiente, regocijarte con el titilar de las velas y maravillarte ante las imágenes que decoran el espacio es toda una vivencia mistérica que merece la pena experimentar.
Con el crecimiento de la Tribu de Iberia y la aparición de sus primeras Sacerdotisas y Sacerdotes, sentimos la necesidad de crear un lugar físico similar en el que toda persona que así lo deseara pudiera experimentar estas sensaciones. Las Diosas de la Península Ibérica alzaban sus voces y sus energías se expandían poco a poco, proyectando en nuestras mentes y corazones la imagen de un lugar de culto a la Diosa en la maravillosa tierra de Iberia. Pero… ¿cómo materializaríamos esa visión?
Erigiendo un espacio sagrado
El Templo en la actualidad
La llama de Iberia
El día 4 de junio de 2011 en el corazón de las montañas de la Sierra de Gredos, 9 Sacerdotisas de Iberia le pidieron prestado a Eguzki uno de sus preciosos rayos.
Un cristal mágico incidiendo en hierbas secas y en cabellos de las nueve sacerdotisas primero echó humo y finalmente llamas. En ese fuego en el que estaba contenida la esencia de la tierra de Iberia, el ADN de sus Sacerdotisas y el calor de Eguzki, la Madre Sol, encendieron la llama de Iberia.
Desde entonces sus Sacerdotisas hemos custodiado esta Llama Sagrada y la compartimos con todas las personas que quieran revivir a la Diosa que Integra, a Iberia la que todo lo mezcla, a la que nos funde y nos convierte en una sola cosa: ELLA.
En honor a las 9 Sacerdotisas que encendieron la Llama de Iberia:
Morgaine, Isabeau, Moira Luz, Jana de Madrid, Samarah, Sainda, Carmen Paz, Anna Osan y Nieves Cottan.
Gracias por abrirnos el camino.
Benditas seáis.
Las Melissas que sostienen el Templo
Al servicio de la Diosa